La idea es mantener una comunicación abierta y amable en todo el proceso, ya que incluso con la con la valla puesta vamos a continuar siendo vecinos.[/vc_column_text][/vc_column][/vc_row][vc_row][vc_column][vc_single_image image=»2933″ img_size=»full»][/vc_column][/vc_row][vc_row][vc_column][vc_column_text]Nuestra recomendación en todo momento es preguntar si a nuestro vecino le gustaría compartir los costes de la construcción de una valla que ambos vamos a aprovechar[/vc_column_text][/vc_column][/vc_row][vc_row][vc_column][vc_single_image image=»2937″ img_size=»full»][/vc_column][/vc_row][vc_row][vc_column][vc_column_text]Cuando se trata de un esfuerzo conjunto, debemos tener un acuerdo escrito con respecto al cuál somos los responsables del mantenimiento, ya que se deberá informar a la agencia en el caso que decidamos vender la propiedad.
Si su vecino no puede o no desea unirse con nosotros para construir la valla, no debemos decepcionarnos, podemos seguir con el plan a nuestro cargo si realmente nos interesa.[/vc_column_text][/vc_column][/vc_row][vc_row][vc_column][vc_single_image image=»2934″ img_size=»full»][/vc_column][/vc_row][vc_row][vc_column][vc_column_text]En el peor de los casos, no nos compliquemos y lo mejor es que lleve el caso un abogado.[/vc_column_text][/vc_column][/vc_row]