Cada salón es un mundo, los hay más pequeños y más grandes, con más o menos luz natural, cuadrados, rectangulares, o incluso, en forma de L… Sea como sea el tuyo, decorar un salón como un interiorista es el sueño de todo amante de la decoración. Jugar con los colores de las paredes, con los tejidos de los sofás, con las lámparas colgantes… es algo que a todos nos encanta pero hay que hacerlo bien ya que de lo contrario conseguiremos no estar a gusto en nuestro salón; y el salón hay que vivirlo.
El salón es seguramente una de las habitaciones que más cambia de una casa a otra. Algunos son enormes, otros pequeños, abarrotados de muebles o minimalistas, estrechos y alargados o totalmente cuadrados, llenos de juguetes o con mucho espacio libre… en fin, hay mucha variedad y puede ser un quebradero de cabeza si lo quieres decorar bien. Por ello, no siempre tenemos claro cómo decorar un salón de la mejor forma posible. Contactar con tu interiorista es la mejor opción para acertar, pero también puedes ponerte tu mismo manos a la obra si sigues ciertas pautas.
Que no cunda el pánico. Sea como sea el salón de tu casa, existen una serie de pautas generales, muy útiles, que te ayudarán a sacarle el máximo partido y convertirlo en una habitación con auténtico encanto, como si hubiese pasado por él un decorador profesional. Veamos cómo lograrlo.
AMPLITUD
Haz que el salón parezca más amplio y espacioso. Lo puedes conseguir con los muebles apropiados y, sobre todo, ¡mucha luz! Los muebles grandes hacen que las habitaciones parezcan pequeñas y abarrotadas, pero los muebles pequeños y minimalistas aportan justo el efecto contrario. Si además evitas poner muebles junto a las ventanas y, en general, evitar los muebles demasiado altos, conseguirás la iluminación perfecta para que tu salón parezca más amplio de lo que realmente es.
COMPLEMENTOS
Primero lo imprescindible, después los complementos. Una de las principales preocupaciones cuando nos preguntamos cómo decorar un salón es no abarrotarlo. Para evitarlo, lo mejor es colocar primero los muebles más grandes e imprescindibles (sofá, mueble de la televisión, etc.) y, a partir de ahí, los complementos. Si lo hacemos todo al mismo tiempo, corremos el riesgo de no darnos cuenta hasta el final, cuando ya es tarde, de todos los detalles que hemos utiizado. Mejor ir paso a paso.
COLORES
Escoger los colores apropiados. Los colores son fundamentales. Lo más recomendable es elegir colores neutros, claros y suaves, que también aportan amplitud y dan sensación de tranquilidad o relajación. Sobre esa base, puedes añadir un toque personal con todo tipo de complementos de decoración (cojines, lámparas, mesas pequeñas, etc.) con otros colores que aporten contraste y dinamismo.
ILUMINACIÓN
Con todas las horas que solemos pasar en casa y en concreto en el salón, la iluminación de esta parte de la casa debe estar especialmente cuidada. Lo mejor es recurrir a una iluminación cálida e indirecta, que surja de varios puntos (lámparas de pie o de lectura, por ejemplo) y apunte a diferentes direcciones. De esa forma, tendremos un ambiente mucho más agradable y acogedor. Evita iluminaciones coloridas.
Estas cuatro recomendaciones son una pequeña base sobre cómo decorar un salón, que te servirán para darle un toque especial y convertirlo en un lugar realmente agradable, como lo haría un interiorista profesional. A partir de ahí, los detalles personales tendrás que escogerlos tú, pero no te pases para que el resultado no sea el contrario.
En Estudiodaes somos un estudio de interiorismo especializado en interiorismo, decoración y arquitectura desde hace muchos años. Formarnos, relacionarnos con grandes marcas y asistir a ferias internacionales hacen que el resultado que vayas a obtener con nosotros sea mejor que lo que esperas.